Bricks Acquisition Company, una firma del sector inmobiliario basada en Estados Unidos, retomó sus planes para llevar a cabo una oferta pública inicial de acciones, bajo la figura de SPAC (Special Purpose Acquisition Company), a través de la Bolsa Institucional de Valores (BIVA).

El director general de la empresa, Alberto Azpúrua Lara, comentó durante una conferencia que mediante la oferta que lanzarán estiman recaudar entre 350 millones de pesos y hasta 500 millones de pesos, estimando un precio de venta por cada acción de 20.50 pesos, equivalente a poco más de un dólar.

La empresa una vez colocada será el primer vehículo listado en México que estará enfocado en la adquisición de activos del sector inmobiliario de salud en Estados Unidos. La oferta se planea llevar a cabo entre la última semana de junio y la primera quincena de julio.

Debido a que es un SPAC tendrá un plazo de 18 meses, a partir de la fecha de la oferta, para llevar a cabo la combinación o fusión de negocios, o la adquisición de una empresa.

La compañía, que había anunciado la intención de listar un SPAC en el primer trimestre del 2019, ahora prevé hacerlo entre la última semana de junio y la primera quincena de julio, explicó el directivo.

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Enseguida explicó que sus planes de salida de hace dos años se vieron frenados porque buscaban tener como principales inversionistas a las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), que en ese momento estaban bajo cambios en sus reglas contables, lo que las limitaba a revisar los prospectos de inversión.

"Lo que pasó la vez anterior fue que orientamos demasiado la transacción a las Afore y llegamos en un momento en que hubo un cambio contable", expuso el directivo.

Ahora, dijo, estarán enfocados a atraer a inversionistas minoristas, así como la banca privada y patrimonial, por lo que su objetivo de recaudación ese redujo.

En el 2019, Bricks buscaba atraer una inversión por 100 millones de dólares (alrededor de 2,000 millones de pesos), en este nuevo intento busca menos de un 25% del objetivo inicial.

La firma también cambió su enfoque de negocio dentro del sector inmobiliario, explicó Alberto Azpúrua, pues tras la crisis sanitaria por el coronavirus, se dieron cuenta de la “enorme” oportunidad que se abrió en el sector de bienes raíces de salud, en los llamados Medical Office Buildings (MOB).

Estos agrupan a grupos médicos de diversas disciplinas que ofrecen servicios médicos especializados o esenciales y, por lo general, son propiedades compuestas por 2 a 4 plantas y un área de estacionamiento.

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Por ejemplo, los de alta exposición a grupos de procedimientos críticos como diálisis, cuyo tratamiento es cubierto por el gobierno para todo ciudadano de Estados Unidos.

Las propiedades se distinguen por la larga duración de los contratos de arrendamiento, cuyo promedio fluctúa entre los 10 y 15 años, generalmente prorrogables por periodos similares.

Dos impulsores fundamentales de la demanda de servicios de salud especializados en la Unión Americana han sido el envejecimiento de la población, así como una disminución en la cantidad de personas sin seguro médico.

Cuando se le preguntó al directivo por qué quieren listarse en la Bolsa de México, ya que es un mercado poco líquido comparado con Wall Street, dijo que el país “tiene de todo para invertir en bienes raíces, pero no ofrece un vehículo que dé exposición al mercado (de bienes raíces de salud) de Estados Unidos".

Originalmente, Bricks buscaba oportunidades de inversión principalmente para adquirir edificios médicos y centros comerciales, tipo strip mall, service y power centers, con rentas dolarizadas al 100 por ciento.

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